Lo más probable es que, lo que siento hoy, sea generado por mis hormonas. Lo más probable es que me llegue el período mañana o esta misma noche. Sin embargo, no puedo evitar sentirme… como me siento. Me siento sola. Y eso no se me quitaría estando acompañada. Añoro un hombre que me abrace y me quiera consentir así como estoy: sin bañarme, despeinada, gorda y triste. Pero si lo tuviera, yo estaría sospechando de su sinceridad al consentirme. Sospecharía que sus motivos tienen que ver con que se siente culpable por estar engañándome o que simplemente no me soporta y quiere que me bañe o me levante de donde estoy desparramada sin ánimo de hacer nada.
Algún hombre, tal vez, me
daría café y me propondría hacer oficio para no sentirme así.
Otro, solo resaltaría
lo poco útil que es sentirme así y se concentraría en sus cosas productivas, desentendiéndose
por completo de mí.
Un tercero, más inseguro que los otros dos, se asustaría mucho y empezaría a hacer chistes estúpidos y
a hablarme de manera infantil “para contentarme”…. Como si mi malestar fuera
enojo contra él. No lo es.
Solo me siento sola. Solo quiero
un amor bonito. Solo quiero ser amada. Quiero que estar en pareja sea emocionante.
Quiero que mi pareja esté cerca emocionalmente aunque estemos lejos físicamente.
Quiero que él me extrañe tanto que piense en mi compañía en cada situación en
la que esté, de modo tal que -cuando por fin hablemos- me cuente todo con lujo
de detalles para hacerme sentir que estuve con él acompañándole.
Y como dice el meme: "Ay sí, como si esas cosas pasaran..."